La Defensoría del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a través de su Observatorio Electoral concentra y realiza las actividades vinculadas a la protección de los derechos políticos y electorales de las y los ciudadanos de la Ciudad de Buenos Aires. El observatorio tiene, fundamentalmente, la responsabilidad de observar el correcto desarrollo de los procesos electorales y de corroborar, tanto con las autoridades como con la ciudadanía en general, que se cumplan las disposiciones legales que regulan los comicios.
El observatorio lidera Misiones de Observación Electoral (MOE) en elecciones locales e internacionales -tanto en el exterior como aquellas realizadas en territorio argentino-, con dos objetivos principales: i) observar el cumplimiento de las condiciones que garantizan el funcionamiento del sistema democrático, promoviendo la protección de los derechos políticos y la participación política en forma justa, igualitaria y sin discriminación de los/as electores/as; y ii) evaluar el cumplimiento de las normas, acciones y procedimientos que se implementan para garantizar el pleno e integral acceso de la población al proceso político y electoral.
La observación electoral nacional e internacional ha logrado ya hace varios años convertirse en una parte fundamental de los procesos electorales en los distintos países de la región realizando un seguimiento de las elecciones programadas y generando recomendaciones con el fin de contribuir a fortalecer los mecanismos democráticos en cada uno de los países.
Dada la larga trayectoria de la institución pero entendiendo que es necesario profundizar en la observancia del cumplimiento y ejercicio efectivo de los derechos humanos durante los procesos electorales, la IOI nos ha brindado apoyo y financiamiento mediante el proyecto “Misiones de Observación Electoral y fortalecimiento de derechos políticos en elecciones”. El objetivo del mismo es facilitar el despliegue de misiones de observación electoral en territorio con enfoque de derechos humanos, para la recolección de información relevante en pos garantizar el ejercicio de los derechos humanos de todas las personas y en particular de los grupos en situación de vulnerabilidad.
Sin embargo, desde que el 11 de marzo del 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia de la Covid-19 hasta el 31 de diciembre del 2021, según IDEA Internacional[1], al menos 80 países han decidido posponer las elecciones nacionales y subnacionales mientras que, al menos, 153 decidieron celebrar las elecciones según lo programado. En América Latina, 12 elecciones han tenido que reprogramarse lo cual generó algunas controversias y exigió el esfuerzo mancomunado tanto de los poderes del Estado como de todos los actores intervinientes en los comicios para su realización.
Con la irrupción de la pandemia y los múltiples desafíos para los derechos humanos que impuso el nuevo contexto en la región, el proyecto cobró vital importancia ya que, como institución de derechos humanos, nos hemos visto obligados a informar y promover el cumplimiento de las medidas de prevención y los protocolos que se aplican en cada etapa del proceso electoral con el objetivo de que las elecciones sean seguras en términos sanitarios y legítimas desde lo político.
En ese contexto, el proyecto se aplazó en el ámbito territorial e internacional, pero continuó el trabajo local de observación electoral con enfoque de derechos humanos y perspectiva de género para seguir contribuyendo al ejercicio efectivo de los derechos políticos-electorales. Como resultado, la Defensoría trabajó en la elaboración de recomendaciones[2] [3] para encontrar nuevas formas de participación y de organización de las elecciones que, respetando la legislación vigente, permitan organizar elecciones seguras y legítimas, y elaboró el manual "La observación electoral con perspectiva de Derechos Humanos"[4] con el objetivo de poner a disposición una herramienta que estimule a otras Defensorías del Pueblo y organizaciones de la sociedad civil a colaborar con la realización de elecciones más inclusivas, más transparentes y más legítimas.
Asimismo, los datos obtenidos mediante las Misiones de Observación Electoral in situ desarrolladas por la Defensoría del Pueblo de la CABA durante las elecciones legislativas nacionales y las de extranjeras y extranjeros que tuvieron lugar en la Ciudad de Buenos Aires en contexto de pandemia, muestran que:
1) Es posible organizar elecciones seguras, legítimas, participativas y transparentes sin necesidad de grandes cambios normativos;
2) Si se cumplen los protocolos sanitarios implementados y se avanza con la vacunación, las jornadas electorales no generan brotes de contagios ni de fallecimientos a causa de COVID-19;
3) Luego de dos años de vivir en pandemia, la ciudadanía ha incorporado las medidas básicas de prevención -uso correcto de tapabocas, distanciamiento físico y sanitización de manos-, lo que facilita el cumplimiento de los protocolos sin necesidad de incorporar nuevos actores como facilitadores u orientadores sanitarios;
4) Algunas medidas como el aumento de los centros de votación, los horarios de prioridad para grupos de riesgo, la utilización de espacios ventilados y la permanente higiene de manos constituyen buenas prácticas electorales a mantener aún en la pospandemia;
5) Tanto en Argentina como en otros países de la región y del mundo, la participación electoral bajó, y en la Ciudad de Buenos Aires, un 20% de quienes fueron a votar lo hicieron con miedo a contagiarse. Es fundamental que todos los actores que intervienen en los procesos electorales colaboren a difundir información de calidad a la ciudadanía para dotar de legitimidad y transparencia a la democracia, garantizar el ejercicio efectivo de los derechos políticos y la salud de la ciudadanía.
Nuestras instituciones tienen una larga trayectoria de cooperación en materia de observación electoral internacional con enfoque de derechos humanos, por lo que consideramos muy valioso continuar con el trabajo conjunto, enfatizando en el despliegue misiones en territorio lo que nos permitirá recolectar información relevante para profundizar las recomendaciones para el desarrollo de futuras elecciones en contexto de pospandemia. En este marco, el apoyo que la IOI ha brindado a este proyecto permite consolidar y fortalecer el rol de las Instituciones de Derechos Humanos, tanto nacionales como locales, en los procesos electorales, logrando velar por la plena vigencia de los derechos humanos en estos procesos.
[1] Panorama global del impacto del covid-19 en las elecciones. Disponible en este sitio web.
[2] “Elecciones en contexto de pandemia y pospandemia. Recomendaciones”, mayo 2020. Disponible en este sitio web.
[3] “Elecciones 2021 en contexto de pandemia. Propuesta para adaptar establecimientos electorales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, octubre 2020. Disponible en este sitio web.
[4] El manual puede descargarse de forma libre y gratuita en este sitio web.
Fuente: Defensoría del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina