Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, la institución del Síndic de Greuges ha querido hacer balance de las actuaciones que se han llevado a cabo en materia de salud mental durante los últimos años y de los principales problemas que la afectan, especialmente tras el impacto que supuso la pandemia de la covid-19.
La sindica de greuges constata con preocupación que algunos recursos en salud mental son insuficientes desde hace tiempo, y que a raíz de la pandemia se han evidenciado aún más estas carencias. En este sentido, en los últimos años la institución ha recibido más quejas y consultas relacionadas con esta cuestión. Concretamente, desde 2018 este tipo de quejas se han incrementado un 41 %, y muchas de ellas exponen problemas de accesibilidad y demoras de las listas de espera para acceder a la primera visita con profesionales de los centros de salud mental. En alguno de los últimos casos que hemos estudiado, el centro de atención primaria calificó la derivación como preferente, pero sin embargo no se dio hora para la atención especializada de psiquiatría hasta cuatro meses después.
Además, en las respuestas que el Departamento de Salud da a las peticiones de información de la institución relacionadas con la salud mental, se reconoce un “déficit de profesionales, que hace que se estén dilatando de forma significativa los tiempos de espera”.
Con la voluntad de ir más allá de los casos concretos, la institución ha abierto una actuación de oficio para analizar la situación de saturación de la salud mental comunitaria en Cataluña.
La Encuesta de salud de la población muestra que actualmente el 24 % de la población mayor de quince años sufre malestar emocional, y que el 11 % manifiesta tener una depresión moderada o grave. Del análisis de los datos se desprende que los problemas de salud mental afectan especialmente a la población más vulnerable: la prevalencia de sufrir una depresión moderada o grave entre la población socialmente desfavorecida dobla la de la población socialmente más favorecida (12,8 % frente a 6,6%).
La síndica se muestra preocupada porque algunos de estos indicadores han empeorado si los comparamos con años anteriores a la pandemia de la covid-19: mientras que en 2019 el porcentaje de la población que manifestaba sufrir depresión moderada o grave era del 7,2 %, en 2022 esta cifra asciende hasta el 10,9 %, lo que representa un incremento del 59 %.
En consecuencia, la síndica trabajará para que todas las administraciones implicadas lleven a cabo las actuaciones necesarias para garantizar el bienestar emocional y la salud mental de las personas.
Fuente: La Oficina del Síndic de Greuges de Catalunya, España